En un año, el estimado compañero Kim Jong Un inspeccionó las unidades de defensa de islote del punto más candente situadas al extremo sur del frente de sudoeste y avanzó por la ruta marítima violenta en un pequeño barco de madera.
Los funcionarios le dijeron unánimemente que nunca fuera al islote Jangjae, añadiendo que este islote era más peligroso que el islote Mu.
Sin embargo, el estimado compañero Kim Jong Un aplacó las almas de los funcionarios diciendo que tenía que ir a todos los lugares donde estuvieran los soldados aunque fueran peligrosos y que el Comandante Supremo existe para los soldados. Así grabó
Un día, cuando el estimado compañero Kim Jong Un inspeccionó el puesto Kkachilbong del monte Osong, los soldados querían gritar a toda voz ¡vivas!, pero solo derramaron lágrimas pataleando, porque era un lugar muy peligroso donde se oían las voces hasta el puesto enemigo.
Aquel día, él dijo lo siguiente:
Detrás de vosotros hay un camino hacia la tierra natal donde viven tus padres y hermanos amantes. Nunca olvidaos esto. Este lugar no es un puesto solitario. El Comandante Supremo siempre está con vosotros. Vendré a menudo al monte Osong.
Todo el ejército y el pueblo confiesan la voz de corazón venerando al estimado compañero Kim Jong Un, quien ha colocado la Comandancia Suprema en la primera línea de frente de defensa de la patria y va manifestando en la altura superior la capacidad nacional del país salvaguardando con firmeza la seguridad de la patria y el pueblo.
Nuestra Comandancia Suprema siempre está en la primera línea de frente.
