En el año 1999, en la RPDC se levantó altamente la consigna sobre brillar el mismo año como año de grandes transformaciones de la construcción de la potencia.
Significa levar anclas del avance histórico para construir una potencia socialista del Juche tomando la base espiritual y material ya asentada por el trampolín.
Esta noticia sensacional provocó una gran sensación en la sociedad internacional.
Como todo el mundo conoce, fue la RPDC que tuvo que sufrir las dificultades más severas debido a la situación anormal causada en la arena internacional. En tal circunstancia, ¿cómo la RPDC pudo determinar una gran meta de la potencia, a la cual muchos países vacilaban intentar, como programa político?
Fue precisamente la demostración de la audacia política llena de confianza de Kim Jong Il, gran dirigente del pueblo coreano.
La construcción de la potencia es el ideal, el cual todos los dirigentes políticos quieren presentar como meta, y la potencia es el paraíso al cual cualquier país y nación quiere alcanzar. No obstante, ningún país se atrevió resueltamente tomarla, porque fue una meta realmente inmensa que requería pagar el precio muy caro.
Aunque tiene un ideal alto, si no tiene una audacia política resuelta para alcanzarlo, se limita a un sueño. Se necesita la audacia política resuelta para alcanzar el ideal y el sueño.
Kim Jong Il, gran dirigente de la RPDC fue un hombre con tal audacia.
Por eso, él superó todas las dificultades y pruebas echadas a la RPDC en la década de 1990 con la marcha forzada del socialismo, a continuación, levantó altamente la bandera de la construcción de la potencia.