Póngase letras de registro Son letras prohibidas

    Fue un día de abril de 1994.

    El gran Dirigente Kim Jong Il, cuando investigaba sobre los compatriotas en el extranjero quienes habían venido a Corea con motivo del día de nacimiento del Gran Líder camarada Kim Il Sung, preguntó si los deportistas compatriotas en Japón se habían encontrado con el gran Líder.

    Un funcionario le informó que los deportistas compatriotas en Japón habían participado en la Competencia Deportiva del Premio Mangyongdae cuando las delegaciones de la Asociación General de Coreanos Residentes en Japón tomaban fotografías conmemorativas junto con el gran Líder.

    El gran Dirigente estaba muy desolado al recibir este informe y ordenó que organizara de nuevo la fotografía conmemorativa junto con el gran Líder después del término de la función de la banda artística de la Asociación General de Coreanos Residentes en Japón.

    Así, los deportistas compatriotas en Japón pudieron compartir un lugar glorioso que deseaban mucho.

    Ellos dieron aclamaciones a toda voz sintiéndose emocionados al amor profundo del gran Dirigente quien supuso sus deseos dentro del alma.