Pyongyang, 18 de agosto (ACNC) -- El estimado compañero Kim Jong Un, Secretario General del Partido del Trabajo de Corea y Presidente de Asuntos Estatales de la República Popular Democrática de Corea, dirigió la campaña de recuperación de los cultivos dañados por el tifón recorriendo las Granjas de Ogye y Wollang del distrito de Anbyon de la provincia de Kangwon.
Le acompañaron en esta ocasión Kim Tok Hun, miembro del Presidium del Buró Político del Comité Central del PTC y primer ministro de la RPDC, Jo Yong Won, miembro del Presidium del BP y secretario del CC del PTC, Kim Jae Ryong, miembro del BP y secretario del CC del PTC, Ju Chol Gyu, miembro suplente del BP del CC del PTC, vicepremier y presidente del Comité de Agricultura, Kim Yo Jong, subjefa de departamento del CC del PTC, y el general de ejército de las fuerzas aéreas Kim Kwang Hyok quien es comandante de las fuerzas aéreas.
Pasando revista a los arrozales damnificados, el Secretario General recibió el parte general del estado de recuperación y averiguó en detalles cómo se tomaron las correspondientes medidas agro-técnicas.
Al mirar las parcelas rehabilitadas que esperan teñirse del color dorado (el de maduración de cereales) prometiendo la abundante cosecha, dijo con mucho placer que ellas también atesoran el sudor de fidelidad de los militares del Ejército Popular de Corea y se extenderá aquí mismo un mar de espigas doradas gracias al patriotismo de éstos.
Como parte del trabajo para mejorar el estado de crecimiento de las plantaciones agrícolas en las parcelas anegadas, él tomó la providencia de movilizar los helicópteros y aviones de transporte ligeros de una unidad de las fuerzas aéreas del EPC y guió personalmente la pulverización de productos agroquímicos.
A la orden del estimado compañero Kim Jong Un, los pilotos de la unidad no. 2623 procedieron inmediatamente a la misión de vuelo con el deseo de cumplir con lealtad su deber y obligación absoluta como ejército del pueblo que siempre está preparado perfectamente para cualquier tarea de defender la vida, seguridad y felicidad del pueblo, y llevaron a feliz término la pulverización sobre las áreas anegadas.
El Secretario General agradeció a los uniformados del EPC que hicieron gran aporte a eliminar completamente las secuelas de tifón y mejorar el estado nutricional de arroz dando pruebas de su abnegación y patriotismo con la disposición de cumplir a toda costa la orden del CC del Partido.
Evaluó altamente a ellos que crearon el milagro de rehabilitar en corto plazo las tierras arables anegadas adonde fueron trasladados tan pronto como se reportaran las pérdidas del tifón y, hoy día, volvieron a cumplir perfectamente la misión asumida para mejorar el estado de crecimiento de los cultivos.
La fuerte mentalidad de nuestros militares de combatir con valentía en el campo de batalla y ponerse también siempre al frente de la materialización de políticas partidistas y defender los intereses del pueblo, proteger los bienes del país y contribuir igualmente a la producción de cereales es precisamente el temperamento propio del EPC y su obligación y deber naturales, indicó.
El Comité Central del Partido movilizó a los militares del EPC en esta campaña de recuperación de daños por el tifón no porque sea grande la extensión afectada de 200 hectáreas, dijo.
Como sucede en el frente en pleno combate donde no se puede ceder ni una pulgada a los enemigos, es imposible dejar perder ni un solo phyong (equivale a 3.3 metros cuadrados) ante la embestida de desastre natural y, por eso, tomó la decisión de asignar la honrosa misión de recuperación al EPC, expresó y prosiguió que este cuerpo armado debe ser servidor fiel al pueblo que no conoce ninguna cesión en la defensa del bienestar de éste.
Otro objetivo importante de la organización de esta campaña con los uniformados residió en despacharlos otra vez al frente de la batalla en defensa de la vida y bienes del pueblo e incrementar así la fuerza espiritual y combatividad típicas del EPC y ponerle más consciente de su misión y deber connaturales, así como educar y despertar a los habitantes locales y los funcionarios del órgano de dirección agrícola para que cuiden con empeño y labren bien las valiosas tierras de la zona habitada siguiendo el modo de lucha de aquéllos, acotó.
Haciendo valer esta vez también su tradición orgullosa de materializar a ultranza las órdenes e indicaciones del CC del Partido, el EPC volvió a demostrar plenamente en la campaña de resarcimiento su fidelidad ilimitada y temperamento de lucha en respuesta a la confianza y esperanza del PTC, evaluó y volvió a mostrarse complacido de que hayan mostrado su enorme potencial combativo los destacamentos correspondientes de las unidades no. 2623, 863 y 974 del EPC.
Sin perder la fe, las granjas perjudicadas por la inundación deben incorporarse con ahínco en la producción agrícola, en particular, abonar y cuidar las plantaciones agrícolas en la segunda mitad del período de crecimiento acorde a las características zonales y condiciones del clima y según la norma científico-técnica y concentrarse en terminar con seguridad la agricultura de este año, instruyó.
Igualmente, todos los directivos y trabajadores del sector agrícola han de levantarse generalmente una vez más en la lucha por alcanzar sin falta la meta de producción cerealera de este año, específicamente, reducir en todo lo posible las pérdidas por meteoros desastrosos y abonar y cuidar sustancialmente los cultivos con visión científica para asegurar su crecimiento seguro, hasta que todas las granjas del país obtengan la abundante cosecha, apuntó.
Al resaltar otra vez la necesidad de perfeccionar en todo el Estado las medidas de prevención de daños y la capacidad de reacción a las crisis, precisó que se debe estar listo para hacer frente con iniciativa a cualquier meteoro desastroso, en particular, revisar y averiguar la capacidad preventiva de siniestros naturales en general como el ordenamiento y reforzamiento de instalaciones, buscar los puntos vulnerables y remediarlos rápida y oportunamente para que no sufran pérdidas las tierras arables y plantaciones agrícolas.
Contemplando el panorama de las granjas Ogye y Wollang rehabilitadas gracias a la abnegación patriótica de los militares, bendijo que lleguen el otoño con cereales y frutas bien madurados y la felicidad a estas tierras recuperadas de los daños naturales.