Entre los premiados de la competición de ping-pong de los Juegos Deportivos para Minusválidos y Amateurs de 2022 figuraba Kim Yong Rok.
Creció en una ciudad local y a tierna edad perdió dos manos y mucha parte de brazos. Nadie creía que él pudiera jugar al ping-pong.
Pero, él lo aprendió según su deseo en el régimen socialista que aprecia y realiza hasta la esperanza de un minusválido.
Después, Yong Rok perfeccionó más la técnica de ping-pong bajo la ayuda desinteresada de cuadros y empleados de la Asociación Coreana de Deportes para Minusválidos.
En aquellos días, percibió en carne propia la gratitud del régimen socialista donde todos forman una gran familia considerando como las suyas las penas ajenas, y puso mayor empeño en el entrenamiento con la decisión de responder a la expectativa de los que le ayudaban de forma desinteresada y enaltecer la patria socialista ante el mundo.
Gracias a esfuerzos incansables, ganó la medalla de oro en una competición internacional y se hizo Premio de Honor Juvenil Kim Il Sung.
Ese día, Kim Yong Rok gritó, en tono emocionado:
“Yo amo a mi patria benefactora, nuestro régimen socialista.”