La fuerza más poderosa que decenas de miles de toneladas de bombas

Un día en el segundo año de la guerra, el coche con el funcionario militar que había recibido una misión especial del gran Líder, camarada Kim Il Sung corría del frente a la retaguardia.

En su corazón estaban grabadas preciosamente las palabras del gran Líder, que iba a transmitir a los combatientes del frente las noticias de la retaguardia de que sus familias estaban bien, que realizaban bien la producción en tiempo de guerra y la ayuda al frente y que defendían firmemente su tierra natal.

El gran Líder mandó personalmente al funcionario militar en el coche para que trajera las cartas con las noticias de la población de la retaguardia.

Los pueblos de la retaguardia, conmovidos por el cálido amor y profundo propósito del gran Líder que iba a transmitir a los combatientes del frente las noticias de sus familias y de su tierra natal, escribieron a los padres y hermanos en el frente las cartas con las noticias de la tierra natal y las encomiendas de lograr la victoria.

Días después, el gran Líder recibió la noticia de que el funcionario militar que fue mandado a la retaguardia había vuelto a la Comandancia Suprema con más de 50 mil cartas. El gran Líder estuvo muy contento y dijo que las cartas crearían la fuerza más poderosa que decenas de miles de toneladas de bombas y tomó las medidas para enviar cuanto antes las cartas al frente.

En todos los frentes en que fueron transmitidas las noticias de la retaguardia tronaron más fuertemente los fusiles y cañones que propinaban lluvia de balas a los enemigos.