Póngase letras de registro Son letras prohibidas

Un día de abril de 2014, un funcionario del Ejército Popular fue llamado por el estimado compañero Kim Jong Un.

El funcionario que se dirigía al lugar donde se encontraba Kim Jong Un estaba en tensión. Aquel tiempo era un período muy agudo cuando en cualquier momento podía estallar la guerra debido a los imprudentes ejercicios militares de los enemigos contra Corea.

Por eso, el funcionario pensó que Kim Jong Un le daría alguna orden urgente concerniente a la situación creada. Pero él recibió las instrucciones totalmente impensadas.

El estimado compañero Kim Jong Un dijo que, acogiendo el Día del Sol iba a reunir a todos los aviadores del ejército en Pyongyang para ofrecerles suficiente descanso y efectuar solemne conferencia.

El funcionario se quedó muy sorprendido. Era inimaginable reunir en Pyongyang a todos los aviadores cuando la situación estaba tan tensa.

Mientras el funcionario estaba sumergido en tal reflexión, Kim Jong Un sonrió y dijo repetidamente que no había por qué preocuparse y que iba a reunir a todos los aviadores en la conferencia.

Así, en Corea todos los aviadores del ejército se reunieron en Pyongyang en aquel momento cuando la situación estaba tan tensa.