Fue un día de marzo de 1941 cuando el Ejército Revolucionario Popular de Corea desplegaba la ardua guerra antijaponesa bajo la dirección del gran Líder, camarada Kim Il Sung.

Después de terminar la cena, hubo el concurso de canciones revolucionarias por unidad de compañías y pelotones.

Al presentarse en el lugar del concurso, el gran Líder dijo que el 8 de marzo, día siguiente, era el Día Internacional de las Mujeres y que, acogiendo ese día, expresaba la felicitación y gloria más fervientes a las guerrilleras, vanguardistas de las coreanas y flores del ERPC, en nombre de su Comandancia.

Prosiguió que para poder realizarlo había que establecer un régimen social que garantizaría la emancipación social de las mujeres. Enfatizó que se podía solucionar finalmente el asunto de emancipación de las mujeres, sólo cuando se levantaba la nueva sociedad, régimen socialista, en que el pueblo es dueño, liquidando la dominación colonial del imperialismo japonés y los residuos feudales que causaban toda clase de males sociales.

Aunque las guerrilleras del ERPC eran diferentes en la edad y biografía, todas eran combatientes vanguardistas de las coreanas y flores del ERPC apreciadas y enaltecidas por el gran Líder.