Póngase letras de registro Son letras prohibidas

    Un día de diciembre de 1993, al estudiar sobre la situación de la visita a la patria de los alumnos compatriotas residentes en Japón, el Gran Dirigente Kim Jong Il preguntó cómo iban a llegar a Wonsan para regresar a Japón.

    Hacía mal tiempo en aquel momento, la carretera helada se deslizaba. Le contestaron que iban en autobús como programado antes. Al mirar rato afuera de la ventana que estaba nevando sin cesar, enseñó encarecidamente de preparar el tren especial y dio instrucciones de tomar medidas estrictas y de revisar el tramo de ferrocarril.

    Los alumnos compatriotas llegaron a conocer tarde del amor caliente del tren en que tomaron y rindieron el máximo agradecimiento.

    El tren especial se corrió a toda velocidad hacia la ciudad en el litoral resonando el silbato alto del tren.

    Sin embargo, el corazón de los alumnos compatriotas corría hacia Pyongyang donde estaba el Gran Dirigente.