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Gran dirigente que dirigió la causa de la independencia antiimperialista a la Victoria

    Con el paso del tiempo se enaltece cada vez más la estimación y la admiración infinita al Gran Dirigente Kim Jong Il quien dirigió la causa de la independencia antiimperialista a la victoria.

    Efectivamente, el Gran Dirigente era el gran líder de la causa de la independencia antiimperialista como alabaron los pueblos del mundo.

    La historia conoce no pocos gran hombres famosos que contribuyeron a la emancipación clasista o nacional de las masas populares y al desarrollo de la civilización de la humanidad.
    Sin embargo, ninguna historia de la época no conoce tal gran hombre como el Gran Dirigente Kim Jong Il quien dio las hazañas seculares, las contribuciones históricas de la humanidad ante la época y la historia.

    Con la decisión firme de conllevar la victoria de la causa de la revolución jucheana en la colina Ryongnam a la temprana edad, el Gran Dirigente Kim Jong Il tomó la bandera roja de la revolución del Presidente Kim Il Sung como la eterna guía de la causa de la independencia de la humanidad.

    La situación internacional de la década 60 era tan complicada.
    Los revisionistas modernos que aparecieron en el interior del movimiento revolucionario internacional se ocuparon siempre de levantar calumnias desacreditando a los líderes de la clase obrera y confundieron el cerebro de los pueblos revolucionarios del mundo con todo tipo de palabras rumores.

    Los imperialistas cometieron las intervenciones abiertas y las guerras de homicidio sangrentadas a los otros piases y las naciones.
    En los países en que hacían el socialismo siguieron el camino entreguista abiertamente diciendo que debían cambiar el fusil y el cañón con el hoz y arado.
    En aquel entonces en una revista ilustrada había una foto de una escultura con el título “A forjar el arado con el tanque roto.” Esta escultura fue publicada como “la gran obra maestra” en algunos países.

    Penetrado con perspicacia el carácter peligroso de este hecho, el Gran Dirigente dio una definición que era un serio error que se derriba de la torpe visión política y que era una obra que los revisionistas difundían la teoría de “desarme” entreguista que rende a la opresión de los imperialistas yanquis.
    Enseñó que los que difundieron a los pueblos a hacer el arado con el tanque roto cuando se hacen más intensa la maniobra agresiva de los imperialistas yanquis es totalmente un absurdo y delirio de locura, la época actual es la época de la revolución y de la lucha, ya que no deben abandonar el arma, mas, en la condición que la mitad parte del territorio del país fue ocupado por los imperialistas yanquis nuestro pueblo jamás puede dormirse en el ambiente pacifico.

     El Gran Dirigente Kim Jong Il hizo gran contribución ideo-teórica emprendiendo las dinámicas actividades ideo-teóricas con la firme voluntad y fe de acero de la victoria de la causa socialista, causa de la independencia antiimperialista.

    A los últimos periodos del siglo 20, el movimiento socialista del mundo no podía evitar las pruebas y dificultades imprevisibles.
    Fue bajada la bandera roja del socialismo en varios países que se volaba durante varios decenios por las maniobras cobardes de los traidores al socialismo y el socialismo fue derrumbado uno tras otro.
    Los imperialistas jactaban apresuradamente de la “victoria” y los defensores del capitalismo jactaron del “fin del socialismo”.
    Ellos formaron alborotos que “el socialismo era una falta desde el principio” y que “el siglo 21 será un siglo sin el socialismo”.

    Exactamente en este momento el Gran Dirigente publicó las históricas obras que ofrecieron la luz al mundo en que se oscurecía dando golpes de gracia a las maniobras criminales de todo tipo de reaccionarios de la historia como los imperialistas.

    “El socialismo es ciencia”, “La difamación del socialismo no será tolerada”, “Tratar con respeto a los precursores de la revolución es un sublime deber moral de los revolucionarios”, “Problemas esenciales de la construcción del partido revolucionario”, “Priorizar la labor ideológica es un requisito indispensable para el triunfo de la causa socialista”…

    Todas las obras que fueron publicadas por el Gran Dirigente constituyen una bomba potente de la revolución que destrozó categóricamente a los enemigos que se dedicaban a las mentiras, calumnias y artimañas frenéticas y la fuente de la fuerza que dio el ánimo al campo socialista que había abandonado solo quejándose.

    El Gran Dirigente dedico todo su esfuerzo y entusiasmo al movimiento de reconstrucción del socialismo depositando la voluntad de acero de lograr nuevo auge del movimiento del socialismo internacional que sufría el dolor por la crisis provisional dándole el ánimo.

     En la víspera del 5 aniversario de la publicación de la declaración de Pyongyang, en marzo de 1997, el Gran Dirigente dio la instrucción programática para fundar el partido revolucionario y lograr el desarrollo victorioso del movimiento del socialismo internacional bajo la bandera de la Declaración de Pyongyang y luego, dirigió que los partidos políticos que firmaron a esta declaración fundaran un partido independiente y popular según el espíritu de la declaración y fortaleciera más la unidad internacionalista y la solidaridad.

    Gracias a la distinguida dirección del Gran Dirigente la táctica de derrotar por separado de los imperialistas que intentaron a derrumbar el movimiento del socialismo internacional fue fracasada y el movimiento del socialismo internacional podía forjar su camino de la nueva marcha reordenando sus filas.