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¿Cuál es el factor principal que determina la grandeza de la nación?

    Su factor principal reside en cuán gran líder tiene la nación.

    El Dirigente Kim Jong Il dijo:

    “Sólo contando con un líder sobresaliente y bajo su dirección, las masas populares pueden convertirse en sujeto independiente de la historia, en una gran nación que va forjando su destino de manera independiente y creadora.”

    La grandeza de una nación es la grandeza del líder que la dirige.

    Una nación no puede ser grande por la largueza de la historia, la extensión del territorio y el número de la población, sino por el liderazgo que tiene.

    Gracias al líder una nación llega a contar con su propia ideología directriz.

    Como el valor del hombre se define por la ideología, la grandeza de una nación se determina por la grandeza de su ideología rectora.

    Como un barco sin brújula va a la deriva y se choca con un arrecife para hundirse, una nación sin una correcta ideología rectora no puede menos de sufrir el fracaso y la derrota. Por lo tanto, para ser una gran nación que forja con éxito su propio destino debe tener la gran ideología rectora.

    El líder da la científica ideología rectora reflejando la aspiración y la exigencia independientes de la nación y la ley del desarrollo histórico, para de esta manera hacer que la nación forje con éxito la vía de su desarrollo siguiendo sólo por el camino de victorias y glorias sin equivocaciones ni vicisitudes.

    La nación se convierte, gracias al líder, en una nación más poderosa, cohesionada firmemente como una fuerza política.

    La fuerza emana de la unidad, que es la garantía de todas las victorias. Como la nación es la colectividad social más integral y sólida su fuerza es grande, pero cuando sus miembros no se unen como una fuerza política no puede poner en pleno juego su poderío.

    El líder funda el partido y forma organizaciones políticas de masas para aglutinar a los ciudadanos como una fuerza política. Por eso, uniéndose como una fuerza política en torno al partido y al líder, pone en pleno juego su poderío.

     La nación se convierte, gracias al líder, en una nación orgullosa que disfruta de una vida digna sólo en el régimen social progresista.

    Dicho régimen es el socialista.

    El líder es quien con el noble amor al hombre y a la nación establece el régimen socialista responsabilizándose del destino de todos sus ciudadanos, para así hacer que ellos gocen de una vida orgullosa y digna en las labores para su florecimiento y prosperidad.

    La nación coreana pudo ser la nación Kim Il Sung más digna y poderosa acabando con la historia de martirios porque lo acogió por primera vez en la historia de miles de años. Y hoy, bajo la dirección del Dirigente Kim Jong Il, hace brillar el honor de como nación Kim Il Sung.

    De veras, para una nación el tener al gran líder es la máxima fortuna y gloria.