El principio filosófico de la idea Juche es que el hombre es dueño de todo y lo determina todo.
El Dirigente Kim Jong Il dijo:
“Como señalara el Líder, la idea Juche se asienta sobre el principio filosófico de que el hombre es dueño de todo y lo decide todo. Esclareció este principio considerando el problema fundamental de la filosofía a partir del hombre.”
Es el principio básico de la idea Juche, que se da respecto a la interacción entre el hombre y el mundo.
Dilucida que el hombre es dueño de todo.
Esto sitúa al hombre que es dueño del mundo y de su destino.
No es el ser que se deja supeditar por el mundo sino que lo transforma según su propia exigencia y voluntad.
El mundo conoce una inmensa cantidad de diversos seres naturales, de los que no hay ninguno que lo transforma, menos el hombre. Ni el león, rey de la selva ni el tiburón, caudillo del mar. Los dos hacen lo que quieren en su mundo respectivo, pero sólo adaptándose a las condiciones dadas sin poder transformarlas según su necesidad. El hombre es el único ser que lo va transformando de acuerdo con sus necesidades.
La situación del hombre en el mundo se va elevando sin cesar a medida que avanza la historia. Va dominando el mundo generación tras generación. Lo que el hombre es dueño del mundo significa que es dueño de su propio destino.
El principio filosófico de la idea Juche dilucida que el hombre lo determina todo.
Esto dice que el hombre desempeña el papel determinante tanto en la transformación del mundo como en la forja de su destino. La transformación del mundo requiere además otros factores como medios materiales y técnicos, que se manejan por el hombre. Hoy el computador supervisa el proceso productivo y el robot monta máquinas, pero según el programa que les manda el hombre. Aun la tecnología de punta no hace las veces del papel humano y el papel determinante en la transformación del mundo reside en el hombre.
En el curso histórico de transformar el mundo el hombre va mejorando su capacidad intelectual y física para poder seguirlo en niveles aun más elevados.
El hombre juega el papel determinante en la transformación del mundo, lo que significa que lo hace en la forja de su destino. El destino humano se forja en el curso de transformar el mundo, de modo que no hay otro ser que pueda reemplazar al hombre en la forja del destino humano. Esto se relaciona con cuantos esfuerzos lo transforma.
El principio filosófico de la idea Juche es el más científico y revolucionario que interpreta correctamente el mundo humano dando una dilucidación clara al problema del destino humano.
