1) El principio de priorizar los asuntos militares
Es el principio que da prioridad y concentra gran esfuerzo en los asuntos militares en llevar adelante la revolución y la construcción.
Primero, prioriza los asuntos militares en la revolución y la construcción.
Esto significa que considerarlos más importantes entre todas las labores de la revolución y la construcción y atribuir primordial significación a ellos.
Lo importante es, antes que nada, elaborar todas líneas y políticas partiendo del punto de vista de dar importancia a los asuntos militares, lo que implica considerarlos primordiales y aclarar la meta de lucha, su misión y medida por medio de realizarlos.
Lo importante es, además, atribuir primordial significación al fortalecimiento de las fuerzas militares.
Esto quiere decir que esforzarse por su fortalecimiento y realizar todas las labores en rumbo a resolver los asuntos militares entre los presentados en la revolución y la construcción.
Segundo, es el principio que hace gran esfuerzo para los asuntos militares.
Es importante resolver los problemas presentados en la revolución y la construcción supeditando a los asuntos militares, lo que significa combinarlos con el fortalecimiento de las fuerzas militares y resolverlos en el principio de contribuir a aquello.
Es importante, además, movilizar todos los recursos humanos y materiales del país a su fortalecimiento.
Esto implica concentrarlos en la solución de los problemas presentados en el sector militar y movilizarlos al reforzamiento del poderío de la defensa nacional aprovechándose de todas las condiciones posibles.
2) El principio de apreciar más al ejército que la clase obrera.
El Dirigente Kim Jong Il dijo: El Partido del Trabajo de Corea se apoya en el análisis profundo de la corriente de la época y las relaciones socio-clasistas en constante cambio, exponiendo, por primera vez en la historia del movimiento revolucionario, la idea de valorar más al ejército que la clase obrera viendo en él núcleo de la revolución.
Se refiere al principio de considerar al ejército como grueso de la revolución, lo que significa considerarlo como colectividad que juega el rol nuclear en la revolución y la construcción y tomarlo como modelo entre las fuerzas revolucionarias.
Lo importante es, primero, seguir el ejemplo del ejército revolucionario en la preparación de las filas revolucionarias.
Esto quiere decir que considerar al ejército revolucionario como fuerzas principales que se debe apoyarse en agrupar y reforzar de modo organizativo e ideológico varias clases y capas de la sociedad y seguir su espíritu revolucionario y combatividad.
Es importante, segundo, tener en el ejército revolucionario el grueso de la revolución y la construcción, lo que significa encargarle importantes tareas para resolver los problemas estratégicos de la revolución y llevar adelante la revolución y la construcción.
Dicho principio se basa en la aclaración científica sobre el grueso de la revolución.
Había teorías existentes que consideraron a la clase obrera como grueso de la revolución en solucionar dicho problema basándose en las relaciones clasistas desde el punto de vista de la concepción materialista de la historia. A mediados del siglo 19 los marxistas esclarecieron que la clse obrera en los países capitalistas occidentales era el proletariado progresista y más revolucionario con la misión de acabar con todo tipo de la explotación y la opresión y construir el socialismo para definirla como clase rectora y grueso de la revolución.
Sin embargo, el problema mencionado no puede ser inmutable en cualesquier época, sociedad y revolución ni solucionable sólo basándose en las relaciones clasistas. La teoría existente de la clase obrera con respecto al grueso de la revolución no se conviene a la actualidad. La época avanzó lejos y se cambiaron las circunstancias sociales, las relaciones clasistas y la situación de la clase obrera. A medida que desarrolla el capitalismo y entra en la época de la industria informática progresa al máximo la ciencia y la tecnología, se cambia la base de vida de la clase obrera y el trabajo va convirtiéndose en la tecnificación. Y aumentan más rápidamente los trabajadores técnicos e intelectuales que los obreros físicos. No podemos igualar a la clase obrera de hoy con la de la era del capitalismo industrial y la época revolucionaria de proletaria ni aplicar tal como estaba la teoría marxista sobre ella y su papel en la realidad.
El tiempo y las condiciones reales requieren nuevas teorías, estrategias y tácticas para preparar las filas nucleares de la revolución y fortalecer las fuerzas revolucionarias.
La idea Songun dilucidó por primera vez en la historia que el ejército revolucionario es el grueso de la revolución.
El problema de que cuál clase y colectividad social puede ser el grueso de la revolución se define por su posición y papel en la revolución y la construcción y su espíritu revolucionario, organizativo y combativo.
Hoy, el ejército revolucionario es una colectividad más revolucionaria, combativa y poderosa. Es la unidad más organizada, fiel al partido y la revolución y firme en ideas y la fe. Defiende a toda costa al partido y al líder, materializa su política y sigue la causa socialista. Y como una colectividad que salvaguarda la patria y la revolución tiene el amor a la patria y el espíritu de defender el socialismo y lucha de manera intransigente contra los enemigos clasistas. Además cuenta con el elevado espíritu colectivo, de disciplina y solidario. No existe una colectividad más fuerte que el ejército revolucionario en el espíritu revolucionario, organizativo y combativo, cuya base es su carácter particular como unidad armada.
Así que el principio de apreciar más al ejército que la clase obrera se basa en la aclaración científica sobre el grueso de la revolución.
