La idea Juche pone en claro que el mundo se va desarrollando más y más para servirle al hombre, dilucidando así la ley de la dominación y la transformación del mundo por el hombre.
El Secretario General Kim Jong Il dijo:
"A medida que crece el papel creador en la transformación de la naturaleza se eleva más su posición como dueño del mundo, y el mundo material que existe independientemente del hombre, se convierte más y más en su servidor."
El mundo se va transformando a favor del hombre, lo que enseña la orientación principal de su dominación y transformación. Eso quiere decir que se orienta a verficar la independencia del hombre.
La verificación de la independencia humana es el fin de la acción humana y la aspiración a ella va en aumento incesante.
La orientación de la transformación del mundo se define por el objetivo de la acción del hombre, que es su único dominante y transformador. Ese objetivo reside en concretizar la independencia. Con tal fin va transformando la naturaleza y la sociedad, en cuyo curso el mundo se va cambiando a favor de la independencia. Es decir, a hacer elevar el lugar del hombre en el mundo.
El objetivo principal de la acción humana encaminada a verificar la independencia no se lleva a efecto de una vez por todas. La exigencia independiente del hombre corresponde a la capacidad creativa. El hombre sigue elevando su demanda en la medida en que se le aumenta la creatividad. En toda etapa histórica va elevando más su demanda que el nivel de la realización de su independencia. Es el proceso que se continúa generación tras generación y que orienta a verificar mejor la independencia humana.
El mundo se va transformando incesantemente a favor de la concretización de la independencia, lo que se deja ver en que se va ampliando la esfera que se dedica a su servicio.
La esfera y el objeto de la naturaleza al servicio del hombre se van ampliando, primero, en el espacio.
El hombre no sólo llegó a dominar más amplia esfera de la tierra sino también del mar, del subsuelo, del aire y del espacio cósmico. De modo que no sólo la corteza terráquea sino tambien el subsuelo y el fondo del mar se aprovechan para el hombre. El espacio cósmico exento del aire y libre de la gravitación terrestre se ha convertido hoy en el crisol de la aleación de metales de buena ley y la fabricación de medicamentos en el estado esterilizado.
Además el hombre logró crear artificialmente estados de infra y supra temperatura y supratensión para transformar y aprovechar la estructura y la forma, la función y el índole de las materias. Lo demuestran los logros científicos entre ellos la conversión del gas en el líquido o el sólido y el no metal en el metal; fabricación artificial del diamante y materiales de mayor dureza; creación artificial de la plasma, "el cuarto estado de la materia" en que mueven desordenadamente los cationes y los electrones y la función de metales de alta fusión por medio de la llama de plasma de 3 mil a 50 mil grados centígrados.
Hoy en el siglo 21 la informática y la tecnología registran un desarrollo vertiginoso de tal manera que el hombre llega a valerse del computador y el robot, que hacen las veces del trabajo humano inteligente y físico, como resultado de lo cual se ha ampliado aun más la esfera y el objeto de la naturaleza al servicio del hombre.
La esfera de la naturaleza al servicio del hombre se va ampliando también sustancialmente.
El hombre se contentaba con conseguir razas superiores por medio del cruzamiento y la mutación de los animales salvajes, pero hoy se sirve de la ingeniería genética para separar el DNA del órgano vivo del cual opta por el gens necesario para cambiar el índole genético, consiguiendo así un género nuevo. También llega a fabricar artificialmente la proteína, la insulina, la hormona, la interferona, etc.
Todo esto da prueba de que la esfera de la naturaleza al servicio del hombre se va ampliando sustancialmente.
Es el mismo fenómeno que pasa en la sociedad.
El paso de la sociedad esclavista al feudal no abolió las relaciones de subordinación humana y la revolución burguesa no acabó con la propiedad privada de los medios de producción y la explotación del hombre por el hombre permitiendo sólo difiriendo formas de la explotación, pero la revolución socialista las acabó definitivamente. El paso de la sociedad capitalista al socialista planteó, en primer plano, la transformación social, pero una vez establecido el régimen socialista se presentan como primeras las tareas de la transformación de la naturaleza y el hombre y con el desarrollo de la sociedad socialista se profundizan las tres transformaciones: social, natural y humana.
Es inevitable que el mundo se vaya transformando cada vez más a favor del hombre, lo que constituye una de las leyes del desarrollo del mundo real.
Hoy a nivel mundial se pone cada vez más grave la destrucción del medio ambiente y en no pocos países reinan los males sociales tales como el asesinato, el gansterismo, el drogadismo, el alcoholismo y la prostitución, lo que causa un gran pavor en la gente.
Son fenómenos que ciertas personas aprovechan para cacarear de que el mundo se va convirtiendo cada vez más a despecho del hombre, tratando así de negar la ley de desarrollo legítimo.
Es vano y malsano el intento. La destrucción del medio ambiente y los males sociales son fenómenos anormales causados por que la transformación del mundo no se ha orientado a servir para el hombre, lo que no se permite valer para negar la ley de desarrollo legítimo del mundo.
La finalidad principal de la acción humana cae en la concretización de la independencia y la exigencia independiente del hombre no cesa de elevarse, de modo que el mundo no puede menos de desarrollarse en bien del hombre.
