La idea Juche dilucida científicamernte la ley de cambio y evolución del mundo.
Esta ley es de la dominación y la transformación del mundo.
El mundo consta del hombre, la naturaleza y la sociedad. Estas dos últimas no se transforman por sí solas al servicio del primero sin contar con su acción. Y el proceso de desarrollo de las dos es de la transformación que se da por el hombre.
La ley de la dominación y la transfomación del mundo pone en claro la correlación esencial y necesaria del mundo en su desarrollo que se logra por el hombre.
La ley enseña que el mundo se desarrolla por la acción y el papel propios del hombre, en sentido de servirle al hombre y en correspondencia con el progreso humano.
El Secretario General Kim Jong Il dijo:
"Sólo por sus actividades dinámicas (hombre) el mundo cambia a su favor."
Esto esclarece el factor principal de la dominación y la transformación del mundo por el hombre, cuyas acciones son independientes, creativas y conscientes.
La acción y el papel propios del hombre sobre el mundo constituyen el proceso dinámico y activo dirigido a dominar y transformar el mundo. El hombre se sirve de sus acciones independientes, creativas y conscientes para continuar transformándolo según su necesidad.
El desarrollo del mundo por el hombre refleja la correlación esencial y necesaria entre la acción propia del hombre y el cambio y la evolución del mundo circundante.
El desarrollo del mundo tiene varios factores, de los que la causa es fundamental. Esta es el factor principal del efecto y los demás constituyen sus condiciones.
El materialismo anterior tomó por la contradicción el factor principal del cambio y el desarrollo de las cosas y los fenómenos. Arguían que la unidad de los contrarios traía consigo la lucha que daba lugar al desarrollo de las cosas.
Fue el criterio sacado de la observación del movimiento de la naturaleza en que no había un ser particular que jugaba acción y papel activos. No obstante, las relaciones entre el hombre y el mundo objetivo son de entre los seres radicalmente diferentes. La acción humana y el movimiento del mundo objetivo se difieren esencialmente por ser la primera intencional y activa y el segundo ciego y pasivo. La primera es superior al segundo.
El hombre no trata el mundo de manera pasiva sino activa, no ciega sino intencional. La acción humana es el proceso del despliegue de la independencia, la creatividad y la conciencia, que constituye el modo de existencia propio del hombre. Este desea vivir y progresar como dueño del mundo. El ser que juega el papel determinante en relación con el mundo no es más que el hombre. De modo que es indispensable que el mundo se transforme acorde con la acción y el papel propios del hombre.
El mundo se desarrolla según la acción y el papel propios del hombre. Esto se patentiza en que la naturaleza y la sociedad se van transformando por la acción propia del hombre y de acuerdo con sus intereses.
La naturaleza se transforma a favor del hombre por su acción independiente, creativa y consciente.
Ella no se convierte por sí sola en condiciones propicias para su provecho, porque se cambia ciega y espontáneamente. Hay muchas veces que destruye el medio ambiente del ser humano causándole calamidades indescriptibles. Hace falta que sea dominada por el hombre.
El trabajo reforma y transforma la naturaleza. Crea medios técnicos y materiales y ambientes favorables necesarios para la existencia humana.
Desde la aurora de la sociedad humana hasta la fecha se registraron grandes cambios en el medio ambiente, lo que es el fruto del incansable trabajo prolongado de millones de años. Independientemente del abnegado trabajo humano dirigido a hacerle al hombre vivir como dueño de la naturaleza no se imagina independientemente de su transformación.
Sólo la acción y el papel propios del hombre reforman y transforman la sociedad.
No se da por sí solo el ambiente social favorable para la existencia humana. La sociedad de clases antagónicas no crea condiciones favorables para la vida independiente y creadora de la gente sino que le causa incontables infortunios y calamidades.
El ambiente correspondiente a la naturaleza del hombre se crea sólo por la lucha dinámica del hombre. Regímenes sociales caducos no se desmoronan por sí solos. Toda clase de fuerzas reaccionarias no ceden su lugar de buenas ganas sino que hacen desesperados esfuerzos por impedir la reforma y la transformación de viejos regímenes sociales. Tampoco se establecen por sí solos nuevos regímenes sociales. El proceso social no puede menos de necesitar la lucha contra las fuerzas reaccionarias interesadas por mantenerse en regímenes sociales caducos. Mientras no desaparezcan las fuerzas caducas y reaccionarias habrá su resistencia a la creación de nuevos regímenes.
La creación de condiciones correspondientes a la naturaleza del hombre no se termina con el establecimiento de nuevos regímenes sociales. Va en aumento constante la aspiración humana a la independencia, por lo que el nuevo régimen requiere ser consolidado y desarrollado. No obstante, no se defiende ni se consolida por sí solo el régimen social avanzado.
Aun no se imagina la consolidación y el desarrollo de nuevos regímenes sociales independientemente de la lucha dinámica del hombre.
Todo esto demuestra que sólo la acción propia del hombre trae el desarrollo del mundo. Esto no queire decir que no hay otros factores que influyan sobre el desarrollo del mundo.
La acción humana requiere ciertas condiciones porque estas la hacen favorable o desfavorable.
Las condiciones geopolíticas favorables facilitan la acción transformadora de la naturaleza y las desfavorables la hacen más difícil y penosa. Las condiciones sociales desfavorables o los regímenes sociales reaccionarios y antipopulares hacen más insoportable la lucha por la transformación social.
Sin embargo, no queremos decir que las condiciones objetivas determinan la acción humana encaminada a transformar el mundo. No son más que factores objetivos de la dominación del mundo. La transformación del mundo se determina por la función y el papel propios del hombre. Es el hombre que determina el nivel de la transformación del mundo.
Es obvio que el mundo se transforma por la acción y el papel propios del hombre.
Esto es la ley de desarrollo del mundo real en que el hombre vive.